jueves, 10 de enero de 2013

LA TORRE TAVIRA (Cádiz y sus torres vigías)

Hoy he salido de casa con la intención de visitar una de las torres vigías más emblemáticas: La Torre Tavira
 
Como el día se prestaba a caminar y la marea estaba baja, he bajado a la playa.
  Desde Santa María del Mar se tiene una bonita visión de la Catedral. A su izquierda aparece la torre.
                                              Está situada a 45,35 m. sobre el nivel del mar.
                   He llegado hasta el final de la playa. Me paso al asfalto, en busca de la Catedral Vieja.


  
Catedral Vieja

Graderios del Teatro Romano.  Se encuentra en el barrio del Pópulo, entre la Catedral Vieja y el Arco de los Blancos, bajo construcciones medievales y modernas, lo que dificulta su excavación. Se descubrió en 1980 y está considerado uno de los mayores edificios de este tipo en España. Es de finales del Siglo I aC., y fue mandado construir por Balbo.
Actualmente no puede visitarse por encontrarse en obras.

                   
                      Muy cercana a la Torre Tavira se encuentra la factoría de salazones (clique)


La Casa-Palacio de los Marqueses de Recaño es una magnífica muestra de la arquitectura palaciega de mediados del siglo XVIII, continuando con la tradición de la casa-palacio gaditana, a la que se incluye la torre mirador como elemento definidor desde los siglos XVII al XIX.


En el ángulo derecho de la fachada principal se eleva la esbelta torre-mirador. 


Después de subir 173 escalones, llego a lo más alto de la torre. La vista es impresionante. Queda a nuestros pies todo el casco antiguo. Me convierto, subido a este otero, en un pacífico francotirador (de fotos). Perdí la noción del tiempo. Casi me tienen que echar. Me hubiera quedado todo el día para captar multitud de detalles. Como verán, esta vez me he dedicado a fotografiar, sobre todo, torres miradores.
 Las torres miradores de Cádiz son uno de los elementos más característicos de la arquitectura gaditana.
Sin precedentes en la arquitectura de la baja Andalucía, se le atribuyen influjos norteafricanos.  Generalizado su uso entre los siglos XVII y XVIII, en la maqueta de Cádiz de 1777, situada en el Museo de las Cortes (C/ Santa Inés) se pueden contar 160 torres miradores, de las que actualmente quedan aproximadamente 126.

Situación de las torres vigías


                                                                   Tipos de torres






 En el S.XVIII, no había comerciante gaditano que se preciara que al construir su casa no sumara en ella
el añadido de una torre mirador.  Las torres de Cádiz fueron el resultado del prestigio y auge que esta
ciudad tomó con motivo de su comercio con las Indias occidentales.Estas torres miradores solían tener planta cuadrada, de uno o dos pisos, con artesonado de madera en el interior



 Cádiz se transformó en el S.XVIII en una de las ciudades más bellas de Europa, bien trazada, adoquinada, limpia, con casas más altas de lo común rematadas por una torre que servía de vigía.  Era una ciudad de vida cara, un gran centro para el comercio, cosmopolita y con muchos extranjeros (genoveses, ingleses, franceses, holandeses...)
 





La torre situada en la calle José del Toro es la única con planta octogonal. Comúnmente se la conoce por “La Bella Escondida” porque no se puede ver desde la calle.


 Las torres miradores tenían una función doble: servir de lugar de recreo y reunión, luminoso y al abrigo
de los vientos, y constituirse en observatorio e información del tráfico comercial de las flotas que atracaban en el puerto.
Fueron construidas en su mayoría en el siglo XVII y XVIII,  momento en que la ciudad era el puerto oficial
de entrada de toda la mercancía procedente de América. La población gaditana de aquel entonces se
componía principalmente de comerciantes, de ahí la generalización de las torres miradores. Cada comerciante quería ver cuándo llegaba su barco, y por otro lado, cada torre tenía su bandera para que los barcos la identificaran desde alta mar.


 Las torres miradores de Cádiz son elementos característicos de su arquitectura dieciochesca y de su vinculación con la vida y el negocio del mar. Como muestra de ello, la mayoría están situadas a poniente, en aquellas casas que están delante de la canal de entrada al puerto dónde, por proximidad a éste, se establecía la clase noble de la ciudad.


 En 1717, Felipe V había dispuesto que se trasladasen a Cádiz la Casa de Contratación y el Consulado
de Indias, por lo que la ciudad obtuvo el monopolio del comercio, dotando al puerto de Cádiz con una
completa infraestructura y beneficiando enormemente al enriquecimiento de la ciudad.


 Aquel monopolio terminó en 1765, aunque este hecho no afectaría ni perjudicaría a Cádiz debido en parte a la extraordinaria situación geográfica de la ciudad y en parte también,  a que los comerciantes gaditanos, inteligentes y capaces supieron desarrollar una actividad en consonancia con los intereses en juego.

En 1792, las ordenanzas municipales prohíben la construcción de torres miradores por su inutilidad y 
peligro de derrumbamientos.


 

 

 
 




 

 


                                                La torre es muy atractiva para los pintores


 Ya de vuelta, volví a pasar por uno de los yacimientos arqueológicos que están en plena actividad. Espero que no pase mucho tiempo para tener información sobre el mismo. Me mata la curiosidad...

1 comentario:

  1. Me gustaría formar parte del viento.
    Una minúscula porción de arena.
    Un microbio diminuto en el silencio
    y traspasar las barreras que me atan
    para dejar de ser materia y
    trasportar mi cuerpo entre sus calles
    que se hacen más vírgenes al verlas.
    Más tiernas.
    Cuando la luz inundan nuestra tierra.

    Gracias por su trabajo.

    un saludo

    antonio

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